
Imagen de Kim Anderson
¡Qué Irónico!
Te escondes, te encierras…¡¡te alejas!!
Mientras que el mundo se muestra y goza, tú únicamente te ocultas…te escondes
Un día de tantos te fijas en su actuar,
Lo estudias, lo tratas de entender, e incluso deseas vivirlo, tal como lo has visto;
Pues quieres sentir ese gozo, esa emoción, ¡esa felicidad!
Bien, pues te arriesgas, el juego ha comenzado, es el momento de actuar…
¡Es el momento de vivir!
Fijas tus metas, trazas tu horizonte, desde ya todo luce muy bien;
Pues claro, ¡has dejado de vivir en la oscuridad!
Luego de un par de días te vas dando cuenta que las cosas no han salido como las planeaste,
Ó por lo menos cercanas a lo que querías…
Día tras día te decepcionas, te desesperas…
¡Hasta que un día decides volver!
¡Hasta que un día decides volver!
Vuelves a encerrarte en ti misma, a acompañarte de tu soledad,
Pues bien, ésta nunca te ha fallado.
Pues bien, ésta nunca te ha fallado.
Regresas a tu soledad, una vez más, convencida que es mejor estar ahí;
Es mejor ver por tu ventana pasar al mundo e incluso por algunos momentos desearlo;
Que estar en ese mundo y morir en soledad.